No hay nada que un BL no pueda mejorar

Dante era una persona reservada con respecto a su pasado, casi tanto como Lawrence de si mismo. Aunque poco a poco ambos se habían empezado a desojar, cada vez que podían estar solos compartían algún programa de televisión, le gustaba la música que escuchaba y el moreno había aprendido a reconocer la forma en que brillaban los ojos del pelirrosa con ciertas cosas. Las fintas a las sospechas de Kat habían sido olímpicas, pero en general los siguientes meses habían ido avanzando. De vez en cuando un roce de manos, una mirada cómplice y para variar una forma de ser que te saca de las casillas, o eso pensaba Dante. Para Law el solo era amable, algo coqueto pero de manera sumamente irrelevante. - Esta bien que no te saque a patadas de mi habitación, pero no crees que se te ha hecho una mala costumbre? - Preguntó mientras seguía sobre mirando la serie en su notebook sentado en el suelo. El cuerpo del pelinegro reposaba en la cama de Lawrence medio viendo la serie, medio oyendo, solo está

Jugar al macho alfa era el fetiche de la pelirroja y esta vez, por una opinión de una actriz en una de las series de fox había terminado contra la pared con un Dante atrapando sus muñecas y con sus labios casi encima de los suyos. Los ruidos de sus jueguitos eran muy elevados para la tranquilidad de la casa. La puerta se abrió y dejo caer las manos. - Estoy tratando de escuchar música, gracias -  Era una frase y luego salio del cuadro cerrando la puerta tras él, sin dar tiempo a nada. La pelirroja miró al chico divertida. - Oye molestamos a Law...y eso que el no se queja... -  - No es gracioso, no quiero importunar a nadie, soy el nuevo - Dijo dejándola y alejándose de ella serio. - No te pongas grave, es solo Law, se le pasará? - Trato de tomarle del brazo pero el pelinegro le miró demasiado serio - Dante? Pasa algo? - El chico suspiró profundo, no sabía porqué no quería ser tocado o seguir jugando, pero sabía que tampoco era para tratar a la chica con esos modos. - Perd

Dante y Kat compartían muchas cosas, vivir juntos había sido una de las impulsivas decisiones que más le gustaban. La chica animaba sus mañanas y la verdad, pese a que le gustaba estar solo, su compañía le hacía sentirse vivo. Esa noche en la fiesta no era la excepción, la estaba pasando muy bien, la gente que conocía a Kat simplemente era muy interesante, y ella con sus juegos de cartas. Se había sentado sobre las piernas  de él después que se había quitado los pantalones por el strip-poker.  Solían coquetear o bromear acerca de eso, pero esta noche en particular se veía más felina de lo común. Su cintura no era pequeña ni grande, sus caderas eran firmes y con una gran terminación, sus senos tenían buena contextura, ni grandes ni pequeños.  La forma que lo miró simplemente era seductora, como el coqueteo de morderse el labio. Era una pelirroja de lo más erótica, eso no cabía a dudas. La cercanía era suficiente para que tuviera la idea de besarla, pero quien concreto eso fue ella

Ya habían pasado meses de vivir con Dante. Las cosas en la casa se pasaban bien, entre bromas y de más. Kat y él solían salir a fiestas de vez en cuando con otros de sus amigos, ella tenía talento social y la presencia del pelinegro era suficiente para ser acogido en cualquier lugar. Law no solía ver mal estos detalles, conocía la personalidad chispeante de Kat, y le bastaba con los momentos que podían pasar juntos como amigos, en realidad no era como si fueran algo más. Era uno de esos viernes en los que Law y Yume se habían dedicado a una maratón de doramas, ya estaba durmiendo en su cama cuando escucho algunos ruidos de muebles moverse y risas. Se levanto y prendió la luz. Kat y Dante estaban en casi estado de bulto. - Van a romperlo todo - Musito Law acercándose para guiar a la chica que ya no podía andar bien con los tacones. - Aww Law...gracias...jajaja....no te imaginas... - La chica estaba algo ida y mucho más jocosa que lo de costumbre - Los boxer de Dante son rosas....