Un poco de una secreta historia que tanto tiempo...oculte

Estábamos en la sala de laboratorio de biología, entonces llegaron ellos...me dijeron que cierto chico me mandaba saludos y yo les respondí un - Acaso es ciego, o qué? -

Fue la vez que supe de él, aunque después supe que quien realmente le gustaba era la Miriam...no me asombro para nada. Entonces y por azar me envió un escrito, algo para que le diera una crítica, fue algo interesante...lo dejo en mi casillero.

Una cosa llevo a la otra y comenzamos a escribirnos, aunque ya nos molestaban como pareja. Yo recién estaba saliendo con la Sabella, pero ya no escribíamos como antes, y esto era arriesgado, esto era adrenalina y mi cuerpo lo exigió con rapidez....entonces lo recuerdo tan bien que aun me causa ligeros escalofríos.

Íbamos tomados de las manos, nos aseguramos de irnos solos, porque le tenía prohíbido que nos vieran juntos, tenía algo que proteger y esto era solo un juego para mi, en donde manipulaba a un idiota que me hacía sentir cierta adrenalina. Entonces...

- Si te doy un beso me golpearías? -

- Qué? Es en serio?... - Me encogí de hombros - No lo haría...un beso es solo un beso -

- Mentira, te apuesto a que me pegas... -

- No, lo haré...un beso no es nada que signifique algo -

Entonces me tomo de la muñeca y me tiro. Fue un beso intenso, ligero y lleno de adrenalina....la saboree en sus labios como si fuera una droga...lo esperaba, pero no dejaría ver nada de lo que pasa dentro en ese momento. Nos separamos, mi mirada estaba inmutable y me encogí de hombros.

- Ves? no significa nada - Seguí caminando y el se apresuro y tomo mi mano. Seguimos hablando de lo que fuera y realmente no lo tomamos en cuenta, pero su carta me confeso que había sido algo que deseo y de cierta manera le dije que yo tenía curiosidad.

Las cosas fueron volviéndose más divertidas...sentía que dominaba el mundo. No me sentía mal por la Sabella, nunca sentí que la engañaba. En realidad sentía que podía querer a un hombre y a una mujer de la misma manera. A ella la amaba, realmente sí, pero por el sentía lo mismo...solo que con ella si podía imaginarme teniendo sexo...con él....no.

Le prohibí que me besara estando dentro del liceo, y de ser posible que nadie nos viera, eso hacía el juego excitante. Recuerdo muchas cosas de él y lo buena que era mintiendo para jugar el juego....porque ambos lo sabíamos...era un juego...uno peligroso y es por eso que nos gustaba tanto...hasta sus celos....
Amábamos el peligro....y esa sensación de pertenencia...

Pasamos muchas cosas....realmente muchas....creo que las contaré poco a poco luego....
Pero la que me marco y recuerdo mejor ahora fue cuando ya llevaba un tiempo con mi chica y él...las cosas eran complejas y el quería que me disidiera por uno.

Una mañana pensé en dejarlo todo, era una locura, pero lo había decidido. Camine con paso firme hasta él, nos miramos unos momentos y luego de saludarnos le dije que tenía algo importante que decirle. El me dijo que también....me emocioné...estaba lista para decirle "Creo que terminaré con la Sabella y vere si podemos estar juntos".

- Dilo tu primero -

- Estoy pololeando -

Entonces la burbuja se rompio y como pude compuse el gesto para hacerlo de sorpresa y saque la mejor sonrisa de mi armario de sin corazón.

- En serio? Genial...!! -

- Y tu, qué querías decirme? -

- Nada, solo que hablemos más seguido, siento que te alejas...bueno eso...debo ir a hablar con los chicos -

Escondí lo herida que estaba y no se lo conte a nadie. Seguí adelante. Nos veíamos menos. Entonces le dije en un escrito que era hora de dejarnos de ver, el ya tenía una chica...aunque todos decían que era muy parecida a mi, que por eso la eligió.Pero él me dijo lo contrario...que no quería perderme....y no lo hizo.

Él estaba con ella, yo estaba con la Sabella, pero perdernos?....No. Seguimos viendonos...menos, pero seguimos....luego muchas cosas pasaron...muchas...no podría resumir dos años o quizás más debido al tiempo separado entre cada encuentro que tuvimos....pero el ultimo fue casi una forma de cortar lazos definitivamente....una despedida.

Era un día soleado. Como nunca fui a comprar una cerveza y me puse a beber mientras lo esperaba en el lugar de siempre...un lugar oculto. Como siempre el llego tarde mientras yo bebía y fumaba.

Fuimos a jugar billar....dandonos una que otra indirecta, y luego fuimos al lugar de siempre a hablar un rato. Nos contamos cosas y como siempre fuimos capaces de hablar de todo sin tapujos....ese era el chance de estar con él...siempre podíamos ser nosotros mismos...eramos parecidos...mucho. Nos reímos y nos sacamos fotos...estan guardadas en lo profundo de mi almanaque de recuerdos. Luego vino la despedida. Cuando comenzamos a alejarnos, camino a nuestro lugar de locomoción....
- Dime que estas dispuesta a ser mi polola como se debe y lo dejaré todo...tiraré lejos los tres años con la chica que estoy. Echaré todo a la basura si me dices que tendremos algo serio...ahora nada te detiene, ella se fue de tu vida, estas sola y yo quiero estar contigo aun....a pesar de los años....yo siento aun lo mismo y sé que tu también. Qué dices?...podrás ser mi mujer? -

Por un momento fue la idea más maravillosa y luego baje la mirada. Lo amaba, sí...lo sabía que era lo peor. Podía no ser guapo, ni inteligente, ni refinado, ni nada por el estilo....pero yo lo quería así, sin embargo.

- Lo siento, por mucho que te ame no creo ser capaz de acostarme contigo ni de ser tu mujer al completo... - Íbamos de la mano y el me apretó un poco más fuerte - Me gustaría poder decirte que sí, pero no puedo... - Hubo un momento de silencio entre nosotros y el suspiro pesadamente, yo sonreí por nerviosismo - No habra besos verdad? -

Él asintió y yo suspire. Entonces yo lo fui a dejar. Iba a subir al colectivo cuando antes de entrar, me miro.

- Recuerda que siempre te voy a amar - Me dijo con convicción y supe a lo que se refería.

- Yo también te amo, tonto... - Le dije con una sonrisa mientras la gente alrededor nos miraba como raros.

Nadie lo entendió  pero creo que yo sí....había un lugar donde siempre nos amaríamos...en nuestros recuerdos, nuestras cartas y en donde sea que estuviera ese viejo romance. En el olvidado lugar oculto, en la tinta sobre el papel, en la complicidad de un beso secreto...en ese lugar que estaba detenido en el tiempo....

Es por eso que quería escribir algo de ti hoy, porque te recordé y leí tus cartas....y de la misma manera que dijimos la promesa....de la misma manera la mantengo, aunque es tonto y nadie lo comprenda....será algo hermoso de mi almanaque de recuerdos.