Dante x Lawrence Indirectas Directas II
- Round one figth - Dijo Yume esperando un comentario tan certero como el anterior.
- Quieres tocar y corroborar eso, Law? - La mirada de Dante fue perversa.
- Quince a quince - Dijo Yume
- Law? - El pelirrosa le miró extrañado, no sabía que habían pasado el límite de la confianza que permitía ponerse apodos o diminutivos en este caso. Se cruzó de brazos con el sartén en la mano - Me enseñaron a no agarrar basura -
Dante lo miro sorprendido, pero no enojado, estaban jugando de todos modos.
Yume se quedó mirando con admiración a Lawrence yle levanto la mano con el sartén - Set y partido....you win! -
Empezaron a reírse los tres y Lawrence encendió la cocina para calentar el aceite, pero a fuego bajo.
- Corten algunos vegetales para hacer un omelete.... -
Cocinaron haciendo bromas y Lawrence les contó de que iba ahora el dorama, en que cap iba y que pensaba de la recomendación de Yume.
- Ya veo, te gusto él....a mi me parece muy interesante, se entrega completamente solo por la felicidad ajena - Dijo Yume de manera soñadora.
- Eso me parece cursi - Lawrence termino de comer el ultimo bocado.
- Creo que tienen buena banda sonora - Dante se encogió de hombros.
- Eso lo dices porque no lo has visto, solo lo escuchas - El pelirrosa se sentó ligeramente inclinado mirandolo de manera traviesa.
- Bueno...yo tengo que irme a mi habitación...tengo una cita - Yume se puso algo nervioso.
- Cita? - Inquirrió Dante.
- Yume tiene novio, solo que trabaja mucho...- Intervino el pelirrosa con una sonrisa cariñosa hacia Yume - El tiene mucha suerte -
El aludido se puso rojo hasta las orejas - Ya! Tiene sus propios deberes... -
- Es un buen sujeto, si Yume lo quiere, tiene que serlo -
Dante miro a Yume, luego a Lawrence, la sonrisa que tenía el pelirrosa era muy hermosa, lastima que no era para él, pero entendía que era una sonrisa dedicada a un hermano, o como consideraba al pelinegro de características más asiáticas.
- En general creo que solo aprendimos a sobrellevarnos, no tengo un carácter fácil...y él tiene sus complicaciones - Se encogió de hombros el aludido e hizo un gesto de despedida - Gracias por la comida -
Dante se levanto para poder coger los platos y suspiró pesado - Ya veo, por eso Yume es mucho más maduro que otros para algunas cosas - Sonríe en dirección al pelirrosa.
- Ja! Te perdono - Dice el pelirrosa pasandole el sartén - Tu no deberías decirme eso, no me conoces - Se apoyó de manera superficial en el mesón de al lavo del lavabo de la cocina.
- Pero quiero hacerlo - Le dijo el moreno sin mirarlo, la frase lo había hecho ponerse serio.
Un silencio algo tenso se dejo caer entre ambos, Lawrence bajo la mirada mientras el agua del grifo sonaba. Dante terminó de lavar, se lavó las manos y se las secó con un paño limpio.
- Tu tampoco eres...una persona fácil de conocer - Se quejó avanzando un poco y estirándose.
- Bueno, al menos soy simpaticon - Se encogió de hombros el pelinegro sonriendole.
- Eres... - Avanzó un poco hasta quedar pasando por la puerta para luego mirarlo serio de soslayo - Más que eso Dante -
El moreno se quedó quito mirando como Lawrence salía de la cocina. Primero se había caído un balde de agua fría en su cuerpo para pasar a un calor que le hizo llevar una mano a su pecho. Sonriendo, tapando sus ojos con la mano derecha.
- Qué se supone que debo pensar de eso? - Susurró pensando que el pelirrosa estaba ya en su habitación.
- Vaya, tu piensas? - El pelirrosa asomó el rostro, se había quedado con la espalda pegada a la pared y había escuchado la pregunta retórica del pelinegro, haciendo que este se pusiera rojo por la vergüenza.
- Law...rence! - Dijo en tono de falsa molestia, saliendo a la carrera tras el pelirrosa que corrió ágil, seguido de cerca por el otro chico.
Al llegar a su pieza trato de cerrar la puerta pero Dante alcanzó a detener la puerta y entró, tomo a Lawrence que se reía desde la cintura poniéndolo en su hombro derecho y luego tirándolo encima de la cama con la suficiente delicadeza para que no fuera un golpe duro.
- Idiota - Dijo el menor entre risas.
Dante se había sentado a un costado de la cama, a la altura de las caderas del pelirrosa.
- Casi me matas jajaj - Su risa se calmaba y su brazo derecho había quedado por sobre su cintura con la mano en dirección a Dante.
- Exagerado... - El otro se fijo en el movimiento suave y le tomo la mano, ambos se quedaron mirando unos segundos hasta que Lawrence tiro de la mano de Dante, dejandolo semi encima de él.
El calor y el corazón del moreno empezaban su ascenso, mientras los ojos felinos del pelirrosa le sostuvieron la mirada casi retandolo a hacer algo.
Sus rostros acortaron distancia hasta que el menor cerró los ojos, el mayor hizo lo mismo pero antes de que terminaran el contacto...
- No nos hemos cepillado los dientes - Susurró el chico con una sonrisa casi malévola.
Dante se alejo abriendo los ojos y mirandolo con confusión.
- Es en serio? -
- Oye, higiene ante todo - Se encogió de hombros y se levantó de la cama apartando al mayor.
El mayor le tomo la mano, Lawrence iba a entrelazar sus dedos, pero en vez de eso Dante le cogió la palma y se la besó.
- Ahora sí...has lo que quieras con esa mano - Le soltó y se levantó para irse.
El chico de cabellos rosados se sorprendió y al comprender el doble sentido frunció el entrecejo sonrojado
- Yo no hago eso! - Le espetó tomando su almohada con fuerza
- Como dije...lo que quieras - Dante le guiño un ojo, pese a que luego de eso recibió un golpe en la cabeza con la almohada.
- Te odio -
- Sé que no es así... - Sonrió - Buenas noches... -
Suspiró y se quedó en el marco de la puerta viendo el andar ajeno.
- Dante...? -
- Sí? -
- Mañana veremos series juntos, no? -
- Claro, sino me golpeas - Se encogió de hombros sin verlo.
- No prometo nada - Sonrió, cruzándose de brazos - Pero lávate los dientes - Dijo antes de cerrar la puerta con una sonrisa entre entusiasmada y ganadora.
- Quieres tocar y corroborar eso, Law? - La mirada de Dante fue perversa.
- Quince a quince - Dijo Yume
- Law? - El pelirrosa le miró extrañado, no sabía que habían pasado el límite de la confianza que permitía ponerse apodos o diminutivos en este caso. Se cruzó de brazos con el sartén en la mano - Me enseñaron a no agarrar basura -
Dante lo miro sorprendido, pero no enojado, estaban jugando de todos modos.
Yume se quedó mirando con admiración a Lawrence yle levanto la mano con el sartén - Set y partido....you win! -
Empezaron a reírse los tres y Lawrence encendió la cocina para calentar el aceite, pero a fuego bajo.
- Corten algunos vegetales para hacer un omelete.... -
Cocinaron haciendo bromas y Lawrence les contó de que iba ahora el dorama, en que cap iba y que pensaba de la recomendación de Yume.
- Ya veo, te gusto él....a mi me parece muy interesante, se entrega completamente solo por la felicidad ajena - Dijo Yume de manera soñadora.
- Eso me parece cursi - Lawrence termino de comer el ultimo bocado.
- Creo que tienen buena banda sonora - Dante se encogió de hombros.
- Eso lo dices porque no lo has visto, solo lo escuchas - El pelirrosa se sentó ligeramente inclinado mirandolo de manera traviesa.
- Bueno...yo tengo que irme a mi habitación...tengo una cita - Yume se puso algo nervioso.
- Cita? - Inquirrió Dante.
- Yume tiene novio, solo que trabaja mucho...- Intervino el pelirrosa con una sonrisa cariñosa hacia Yume - El tiene mucha suerte -
El aludido se puso rojo hasta las orejas - Ya! Tiene sus propios deberes... -
- Es un buen sujeto, si Yume lo quiere, tiene que serlo -
Dante miro a Yume, luego a Lawrence, la sonrisa que tenía el pelirrosa era muy hermosa, lastima que no era para él, pero entendía que era una sonrisa dedicada a un hermano, o como consideraba al pelinegro de características más asiáticas.
- En general creo que solo aprendimos a sobrellevarnos, no tengo un carácter fácil...y él tiene sus complicaciones - Se encogió de hombros el aludido e hizo un gesto de despedida - Gracias por la comida -
Dante se levanto para poder coger los platos y suspiró pesado - Ya veo, por eso Yume es mucho más maduro que otros para algunas cosas - Sonríe en dirección al pelirrosa.
- Ja! Te perdono - Dice el pelirrosa pasandole el sartén - Tu no deberías decirme eso, no me conoces - Se apoyó de manera superficial en el mesón de al lavo del lavabo de la cocina.
- Pero quiero hacerlo - Le dijo el moreno sin mirarlo, la frase lo había hecho ponerse serio.
Un silencio algo tenso se dejo caer entre ambos, Lawrence bajo la mirada mientras el agua del grifo sonaba. Dante terminó de lavar, se lavó las manos y se las secó con un paño limpio.
- Tu tampoco eres...una persona fácil de conocer - Se quejó avanzando un poco y estirándose.
- Bueno, al menos soy simpaticon - Se encogió de hombros el pelinegro sonriendole.
- Eres... - Avanzó un poco hasta quedar pasando por la puerta para luego mirarlo serio de soslayo - Más que eso Dante -
El moreno se quedó quito mirando como Lawrence salía de la cocina. Primero se había caído un balde de agua fría en su cuerpo para pasar a un calor que le hizo llevar una mano a su pecho. Sonriendo, tapando sus ojos con la mano derecha.
- Qué se supone que debo pensar de eso? - Susurró pensando que el pelirrosa estaba ya en su habitación.
- Vaya, tu piensas? - El pelirrosa asomó el rostro, se había quedado con la espalda pegada a la pared y había escuchado la pregunta retórica del pelinegro, haciendo que este se pusiera rojo por la vergüenza.
- Law...rence! - Dijo en tono de falsa molestia, saliendo a la carrera tras el pelirrosa que corrió ágil, seguido de cerca por el otro chico.
Al llegar a su pieza trato de cerrar la puerta pero Dante alcanzó a detener la puerta y entró, tomo a Lawrence que se reía desde la cintura poniéndolo en su hombro derecho y luego tirándolo encima de la cama con la suficiente delicadeza para que no fuera un golpe duro.
- Idiota - Dijo el menor entre risas.
Dante se había sentado a un costado de la cama, a la altura de las caderas del pelirrosa.
- Casi me matas jajaj - Su risa se calmaba y su brazo derecho había quedado por sobre su cintura con la mano en dirección a Dante.
- Exagerado... - El otro se fijo en el movimiento suave y le tomo la mano, ambos se quedaron mirando unos segundos hasta que Lawrence tiro de la mano de Dante, dejandolo semi encima de él.
El calor y el corazón del moreno empezaban su ascenso, mientras los ojos felinos del pelirrosa le sostuvieron la mirada casi retandolo a hacer algo.
Sus rostros acortaron distancia hasta que el menor cerró los ojos, el mayor hizo lo mismo pero antes de que terminaran el contacto...
- No nos hemos cepillado los dientes - Susurró el chico con una sonrisa casi malévola.
Dante se alejo abriendo los ojos y mirandolo con confusión.
- Es en serio? -
- Oye, higiene ante todo - Se encogió de hombros y se levantó de la cama apartando al mayor.
El mayor le tomo la mano, Lawrence iba a entrelazar sus dedos, pero en vez de eso Dante le cogió la palma y se la besó.
- Ahora sí...has lo que quieras con esa mano - Le soltó y se levantó para irse.
El chico de cabellos rosados se sorprendió y al comprender el doble sentido frunció el entrecejo sonrojado
- Yo no hago eso! - Le espetó tomando su almohada con fuerza
- Como dije...lo que quieras - Dante le guiño un ojo, pese a que luego de eso recibió un golpe en la cabeza con la almohada.
- Te odio -
- Sé que no es así... - Sonrió - Buenas noches... -
Suspiró y se quedó en el marco de la puerta viendo el andar ajeno.
- Dante...? -
- Sí? -
- Mañana veremos series juntos, no? -
- Claro, sino me golpeas - Se encogió de hombros sin verlo.
- No prometo nada - Sonrió, cruzándose de brazos - Pero lávate los dientes - Dijo antes de cerrar la puerta con una sonrisa entre entusiasmada y ganadora.
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